domingo, 30 de noviembre de 2014

Semana del 23 al 29 de noviembre del 2014

¡Vaya semanita! Esta vez nos ha tocado lluvia y …¡tornados! Menos mal que estábamos todas distribuidas en nuestros refugios particulares, al amparo de las urbanizaciones, unas, y en lo alto del pueblo, otras. Es curioso, pero la gente del lugar estaba contenta, y la expresión que más se oía era: ‘’¡Esto es bueno para llenar los pantanos!’’. Como es casi, casi natural, las personas normales están hartas de hablar de los corruptos, y lo que les preocupa es que el próximo verano haya agua suficiente y, de esa manera, no funcionarían las desaladoras y no habría un incremento en el precio del agua.

Como es obvio, no nos hemos podido reunir, y yo me he dedicado a lo que más me gusta, es decir, a no hacer nada. Pero lo malo de este ‘vicio’ es que la imaginación se te desboca, y lo mismo  estás recordando tiempos pasados que pensando en lo que quieres hacer en el futuro. Y es que estamos ya para comenzar diciembre y se agolpan las tareas, mediatizadas, como siempre, por eso que nos meten por los ojos desde la TV que vemos a través de las ventanas de los pocos apartamentos de la zona que están habitados en estas fechas. Y por lo que parece nada cambia de un año para otro, por lo menos en cuanto a los anuncios emitidos para inducir a comprar regalos, y cuanto antes mejor: perfumes y colonias para señoras y caballeros, juguetes para los más pequeños, y lotería de Navidad para todos. ¡Estos humanos se preparan un diciembre bien ajetreado!

Y  yo, mientras tanto, rememorando con la Tatiqui nuestra estancia en Londres: los jardines de la casa donde nos aposentamos,



la visita el British Museum, desde sus cristaleras



el paseo por el Covent Garden Market,



y nuestros devaneos a orillas del Támesis, junto a Citi.





En resumen, semana de mucho agua y pocas ganas de charlar

No hay comentarios:

Publicar un comentario