Semana del 28 de febrero al 5 de marzo del 2016
Tal vez ha sido porque estaban casi todos hartos de la prepotencia del
Pirulo; quizás porque la Tatiqui había entrado en un episodio de la denominada
‘’senectud complaciente’’ y se adaptaba sin oposición ninguna a lo que saliese
por el pico del Pirulo; puede ser que la
culpa la tenía el silencio prolongado al que se había sometido voluntariamente
el grupo en las últimas reuniones; pero el caso es que esta semana, en cuanto
llegaron los tres primeros, se ha organizado algo semejante a una reunión a
dieciséis, de distintas tendencias e ideologías, para perfilar un pacto. Y la
que ha iniciado el intercambio de algo más que opiniones ha sido, contra todo
pronóstico, la Surfi.
- ¡Anda, Pisha! ¡Que vais a
dejar de ser famosos por la Constitución del 12! El grito de ¡Viva la Pepa!, lo
estáis sustituyendo por el de ¡Viva el Kichi! Allí por donde va, arrasa. Se
están acuñando cantidad de expresiones con su nombre, y esto no ha hecho más
que empezar. ¡Y con lo de las redes sociales esas…!
-¡Hasta aquí ya ha llegado!,
corroboró el Guindilla. La demanda de ron venezolano en Gibraltar ha
crecido el 100% en pocos días. Con eso de ‘’¡Vamos a tomarnos un kichi!’’, las
bodegas Barbadillo están que trinan. Todo el mundo pide un ‘kichi’ en los bares
a cualquier hora y menos mal que los camareros, que es el gremio que está más
al loro, lo asoció desde el primer momento a un chupito de ron venezolano.
1977- ACAPULCO
PRECEDENTE A TOMARSE UN 'KICHI', PERO A LO BESTIA
- Pues no te digo nada con lo de
‘’Hacerse un kichi’’, complementó la Surfi que estaba con más ganas de
cámara que el Presidente del Congreso.
Hasta le han encontrado aplicaciones en dos campos en el que está implicado
todo el mundo desde los 16 años hasta la edad en la que pueden incluirte en un
ERE.
- ¡Cuenta, cuenta!, enzurizó el Pirulo
- Hay dos variantes, explicó
la Surfi. La primera es la que aun estoy
a tiempo de aplicármela, que es la de ‘’Hacerse
un kichi … académico’’, y que consiste
en pasarse media vida haciendo una carrera aunque sea tan ‘sencilla’ como la de
Historia. Hay que hacerla con calma, en unos 8 o 10 años, como el Kichi. Así
además te puedes enterar con todo detalle hasta de lo que hicieron los fenicios
por estas tierras, y asumirlo e integrarlo en tu propia historia. Que si no, ni
caes en la cuenta de que muchos de tus traumas es por culpa de lo que hicieron
tus ancestros. Y la otra acepción es….
Y aquí la interrumpió bruscamente el Pisha que debía de estar harto de
que se metiesen tanto con su alcalde sin darle ‘chance’ para intervenir siquiera
un poco
- ES,..., ES, gritó más que dijo, el ‘’Hacerse un kichi laboral’’, aunque esto requiere unos esfuerzos
iniciales bastante duros. Consigues mediante oposición, enchufe, o mitad y
mitad, un puestecillo, el que sea. Y en cuanto lo logras, zascandileas por
donde sea necesario para llegar a la situación laboral más digna y menos
laboral, valga la redundancia. ¡Liberado
sindical! ¡Ahí es nada!
1977- AKUMAL
LIBERADO SINDICAL HACIENDO UN ESTUDIO SOBRE POSIBLES VIAJES DEL IMSERSO EN LA RIVIERA MAYA
- Ahora me explico lo del otro
día en el Ayuntamiento, terció el Pirulo. Como entre los liberados es típico salir al cafelito a media mañana y
eso crea adicción, creo que fue por culpa de ésta por lo que mandó desalojar las
dependencias del consistorio, incluido el salón de plenos donde, según dicen,
se celebraba uno. Dijeron que la justificación fue un aviso de bomba. Pero el
zurrumurru que se extendió por todo Cái es que llevaban varias horas de reunión
y no se veían visos de que aquello concluyese. Solución: aviso falso, y
desalojo de las dependencias municipales y dispersión de concejales y
funcionarios por los bares de la zona a tomar su cafelito.
- Pues yo tengo que añadir algo,
dijo el Guindilla. Ya se ha acuñado la
frase de ‘’Larga cambiada a lo Kichi’’. Y conste que no se refiere a lo que
hacen los toreros valientes a la salida del morlaco del toril. Sino que se
aplica a desviar las celebraciones que no te gusten lo más lejos posible, y si
es a Madrid, mejor que a Sevilla. Lo dicen por eso de la entrega de los premios
‘’Libertad Cortes de Cádiz’’ que siempre se han entregado en la Tacita de
Plata. Pero como esta vez había que dárselos a unos opositores venezolanos,
pues que la foto se la hagan en la Puerta del Sol con quienes quieran.
El Filloas, que siempre se ha distinguido por su bonhomía y su empeño
en que no se molestase a nadie más de lo debido, intervino haciendo uso de su
voz suave, acariciante, sin aristas, y de su verbo cuidado
- Dejaos de críticas ácidas con
el Pisha y su tierra, que él no tiene toda la culpa de lo que acontece. Que
meteduras de pata e intelectos no muy sobrados hay en todas partes. Y si no,
mirad la ocurrencia que ha tenido un párroco de mi tierruña, concretamente en
Orense. Y lo que voy a contar, que no se generalice al clero que tampoco tienen
por qué ser científicos probados.
Después de animarle todos con gestos y algún que otro ‘’¡Olé tu
garbo!’’, dicho sin acritud, prosiguió.
- Pues resulta que tenía un
serio problema en la techumbre de madera de su iglesia y era que se la estaban
comiendo la polilla, la carcoma, o lo que fuese, sin conmiseración alguna,
poniendo en peligro la estabilidad de la cubierta, pues se estaba cebando en
las cerchas y las vigas de sustentación. Supongo que probaría primero con agua
bendita pero, tal vez siguiendo los consejos de algún parroquiano de esos que
hay siempre y que se autoproclaman como expertos en todo, roció la madera con
queroseno y aceite. La verdad es que el remedio suele resultar eficaz contra la
carcoma, pero hay que dar tiempo para que surta efecto. El citado párroco debía
de estar hasta el bonete del problema y, quizás para acelerar la muerte de los
bichos, decidió ayudarse con un aumento brusco de la temperatura, para lo que
pegó fuego a la madera empapada con productos inflamables. El efecto fue
inmediato. Las polillas, la carcoma o lo que fuese murieron por
achicharramiento y la techumbre no se desplomó gracias a que el 112 funciona
cada vez con más celeridad en las, nunca mejor dicho, parroquias y concejos
orensanos.
Risas y carcajadas no se oyeron, pero graznidos estentóreos, hasta del
Pisha. En cuanto el volumen del sonido disminuyó lo suficiente, el Filloas
aprovechó para continuar con su charla.
- Pero no os creáis que todos
tienen las neuronas descolocadas en Galicia. Que ha aparecido un gallego en el
programa ‘’Los Increíbles’’ que es capaz de leer los códigos QR a simple vista,
sin Smartphone, ni apps, …¡ni gaitas gallegas! El tío mira, piensa un poco,
y…¡te lo traduce!
- Pues algo de eso deben de
tener algunos presos vascos, pues sacan títulos universitarios como churros,
dijo la Txuti-Txori. Tenemos los presos
más listos de la historia, y consiguen el título de Licenciado en Derecho o el
que se les ponga por delante en muchos menos años que el Lute. Aunque hay malas
lenguas que dicen que hay truco, pues cursan sus estudios en la universidad del
País Vasco. ¿Por qué será?
En ese momento se incorporó el Borni, y el Pisha, que hasta ese
instante había permanecido casi mudo, comenzó a meterse con él preguntándole si
su retraso se había debido a que había estado buscando ancestros catalanes al
Cid Campeador para justificar la anexión de los Países valencianos a Cataluña.
El Borni lo tomó a mal y, muy cabreado, contraatacó diciéndole:
- ¡Tú, cállate! Que ni siquiera
podéis decir que los chiringuitos son una creación vuestra. Para que te
enteres, el primer chiringuito se abrió en Sitges con ese nombre en 1913. Y si
no te lo crees, te cuento la historia.
1977-XOXIMILCO-MEXICO DF
PRECURSORES MEJICANOS DE LOS ACTUALES CHIRINGUITOS
Todos le animaron a que continuara, más que nada para darle un poco de
‘cancha’, pues llevaba una temporada que no abría el pico ni para contestar a
las puyas constantes que le lanzaba el resto. Así que, carraspeó un par de
veces y dijo
- ¡Pues sí! La palabreja a la
que dais tanto aire parece que viene de ‘’chiringo’’, que no es otra cosa que
un café que hacían en Cuba rellenando de granos o café molido una media y
pasando agua caliente, Y resulta que a ese bar de Sitges iba un intelectual
llamado César González Ruano, que por cierto no creo que ni siquiera era
catalán, a tomarse un cafelito mientras escribía de sus cosas en una de sus
mesas. Y recordando sus tiempos de Cuba o sus indagaciones periodísticas y, tal
vez, por lo malo que era el café, lo bautizó con el nombre de ‘’El
Chiringuito’’.
Y antes de que nadie pudiese contestar al Borni, ni siquiera
intervenir para felicitarle o agradecerle su información, la Tatiqui medio
gritó:
- ¡A cenar todas al chiringuito
que está junto a La Pesquera!
Y fue una de las pocas órdenes que nos había dado en mucho tiempo que
nadie discutió ni puso ‘’peros’’.
1979-ALEGRÍA DESBORDANTE EN LA CELEBRACIÓN DE UN PACTO CUALQUIERA
No hay comentarios:
Publicar un comentario